Groserias en el desayuno

Dos hermanitos, el mayor le dice al menor:

- ¿Hermanito, no crees que nosotros somos lo suficientemente grandes como para decir groserías?

A lo que el menor contesta:

- Si hermanito ya somos lo suficientemente grandes.

Entonces el mayor le dice al menor:

- Bueno hermanito: yo voy a decir coño y tu vaina.

Y el menor le contesta:

- OK!!

En ese mismo instante entra la mamá y le dice al mayor:

- ¿Qué quieres desayunar hoy, hijo?

A lo que el mayor contesta:

- Coño, yo quiero Frutiloopies!
Y la mamá enojada lo ve y le da aquella rolitranco e’ cachetada. El niño da como 4 vueltas, se estrella contra la pared y se da tremendo coñazo en la cabeza, queda con la boca partida, todo reventado; el hermanito menor se queda asombrado viéndolo.

Entonces la mamá se voltea hacia donde el menor y le dice:

- Y tú…¿qué quieres de desayunar?

Y el menor que se quedó perplejo y asustado, le responde

- NI DE VAINA FRUTILOOPIES.